2 técnicas de ligue (una comprobada y otra por comprobar)

La primer técnica de ligue está comprobada pero no me atrevería a garantizarla.

Para explicarla les chismorreo de dónde surgió:

Pues bien, estuve un tiempo sin novia o algo parecido, entonces empecé a pretender a dos tres chavas, una primero que nomás me decía "sí me gustas pero no estoy lista" o una mamada de esas, otra después que nomás se hacía la que no entendía mis pretensiones, y una más que me fajaba pero después es como si nunca hubiera pasado, de modo que nomás no cuajaba ninguna. Y así me fui enfadando de andar "rogando" un poco de amor. Hasta que dejé esos asuntos. Luego (re)concí a una mujer maravillosa que luego luego me dijo "vas, mi Rey, pero en serio". Y yo encantado. Eso de andar de mujer en mujer como un mendigo había dejado de ser atractivo desde hace mucho. Ton's esta mujer me dice "vivir juntos, tener un hijo y cuanto antes". Yo encantado. Tan pronto ventilo la noticia las 2 que 3 mujeres anteriormente mencionadas se abalanzan obre mí.

¿Por qué cuando andaba tras ellas me ignoraban y tan pronto saben que me quiero arrejuntar con alguien resulta que siempre sí quieren? "Uy, cómo que te vas a casar, te me escapaste, tú siempre me has gustado" ¿A poco si "dejo" a mi chava y les digo "Sale, cásate conmigo" van a decir que sí? ¿Por qué hacen éso? ¿Los hombres también lo hacemos?

De modo que: Para conquistar a una chava que no te pela dile "Voy a casarme" y en seguida te dirá "No, espérate, yo siempre he querido andar contigo"

La segunda técnica no la he probado aún, pero se trata de plantear el siguiente diálogo:

Hola, mi nombres es ____________ y tengo el gen PAX9 mejor adaptado ;)

Si no funciona a la mejor habrá qué contextualizar:

Dicho gen es el responsable de que algunos aún desarrollen Muelas del Juicio, lo cuál, como es sabido, son un remanente evolutivo inútil. Así como lo es el apéndice, la "piel de gallina", y más.

De modo que el hecho de que no me salgan las muelas del juicio implica mejor genética lo que me hace mayor deseable para procrear, lo cuál es irresistible para cualquier mujer.

Cuando el amor llega así, de esta manera...

Todos conocemos a una H. Poulain: es el prototipo de chica insegura e inadaptada,   hostil  con aquellos que no encajan en su -poco realista- visión del mundo.  Es misógina, piensa que las mujeres, sobre todo las guapas, son garrapatas chupasangre. Padece del complejo  Amèlie:  no puede hacer frente a la realidad y vive en un frágil mundo de fantasía; a diferencia de la niñita de la película, ésta optó por la amargura.
¿Señas particulares? No es guapa, ni se procura; argumenta que dedicar tiempo a su arreglo es frivolidad y putería (la verdad, es que en el fondo sabe que ni con buenos trapos y 2 horas diarias de gym, se vería mínimamente sexy). Es feliz  en compañía de los hombres y la aceptación de los mismos la hace sentir bastante orgullosa de sí; rehuye de la compañía de las chicas, por considerarlas tontas; prefiere camuflarse entre los hombres.  Hasta aquí, podríamos hablar de una persona congruente, pero no es así...

 O. Quincampoix,  es un chico que gracias  a una serie de calificativos positivos muy bien merecidos, y otras tantas virtudes colgadas a la fuerza, súbitamente roba un lugar en el corazón de nuestra protagonista. Cuando él aparece, comienza lo bueno: la chica que denunciaba los asuntos de amores (y colchones), como cosas para "mujeres huecas, sin metas en la vida", de pronto descubre que su corazón late fuerte cuando escucha su nombre con "esa voz" y que tiene estremecimientos cuando se tocan por accidente.  A la segunda sonrisa entre ambos, el cerebro se le dispara y comienza a imaginar  cómo envejecerán juntos:

Aunque aún no está declarado, el suyo será un amor diferente, cien por ciento puro, demasiado para explicarse con palabras...  ¡Mamadas!, lo que aquí está pasando, es lo mismo que en todas las historias de amor, pero dada la falta de costumbre, la señorita exagera sus reacciones y comienza a idealizarlo todo. No la vamos a colgar por enamorarse (además, ¿quién no pierde el piso cuando conoce a alguien súpermaravilloso?), lo que vamos a criticar, es el peso de esperanzas colgadas en una relación que ni siquiera ha despuntado.

Él no ha tenido tiempo de demostrar apenas un interés amistoso por ella, cuando ya la tenemos soñando despierta, interpretando cada gesto de O. Quincampoix como inequívoca señal de  deseo romántico. La vemos fantaseando con sus amigas, escribiendo largas reflexiones sobre la nueva oportunidad que le da la vida y todas esas cosas cursis que todos hacemos cuando conocemos a alguien que nos genera cosquilla. Lo rudo del asunto  es que aún sin haber iniciado una relación, ya piensa que el hombre y su destino son suyos, por la inimaginable cantidad de compatibilidades que ella ha encontrado entrambos.

Para este punto, en el que ya todos los amigos en común conocen o sospechan, de las fantasías románticas de H. Poulain con O. Quincampoix, él ni siquiera se imagina (o no quiere ver) que su nueva amiga asexual, está completamente enamorada de él.

Sonó feo, ¿verdad? Ninguna chica, por dejada que sea, aprecia ser vista como asexuada por su objeto de deseo, pero en este desafortunado caso,  ella es la amiga divertida, con la que se lleva tan genial como con la hermana, a la que no tomaría en cuenta como ligue: por el respeto, cariño, confianza  y nula atracción sexual que siente hacia ella.  Cruel. Lo que H.P. entiende como el principio de un gran amor, para O.Q, es el comienzo de una linda amistad.

La vida, gusta de las bromas pesadas y para hacer más difíciles las cosas, contamos con la presencia de un tercer personaje:  "L".  El momento en el que "L" aparece es indistinto, lo importante a describir es el modo:
Ella conoce a un chico, le resulta divertido, le parece atractivo, se siente cómoda en su compañía y decide conocerle un poco más. Sin llegar a la alucinación romántica, se pregunta cómo sería estar con él y considera la posibilidad de un acercamiento. Demuestra interés en O.Q. y aprovecha su tiempo juntos para evaluar posibilidades.
"L.", puede o no, ser guapa, inteligente, sexy, divertida o despampanante,  lo que por desgracia para H. Poulain, es un hecho, es que ambas se sienten interesadas por el mismo chico y para empeorarlo todo, O.Q.  la encuentra atractiva.


Al cabo de algunas semanas, las cosas siguen un curso natural, los que se gustan, se acercan cada vez más; nuestra protagonista sigue enamorada en silencio y pasa las noches interpretando todas las claves secretas con las que, supuestamente,  O. Quincampoix le demuestra veladamente su pasión.


 La vida está llena de obviedades: Un buen día, Quincampoix y "L" comienzan una relación romántica. Nuestra señorita H., no está enterada del asunto, pero algo se mueve dentro de ella y decide que es momento de actuar: Le cuenta a un amigo de lo mucho que sufre en la espera de que O.Q. se anime a dar el primer paso. Está claro que contará una versión en la que Quincampoix se siente atraído por H., pero es demasiado tímido para acercarse a ella, por lo que el amigo, no enterado de la realidad, ni de las nuevas, animará a H. para que dé el primer paso y ella hace caso, pues sólo buscaba un pretexto...

H. mandará un pastelito con una nota, obsequiará un libro, enviará una postal electrónica, hará una llamada telefónica o bien, buscará un frente a frente con su querido O.. Sea cual sea el medio de comunicación, la respuesta será la misma: Estoy con alguien más, sólo te veo como mi amiga.

Golpe en seco. Nuestra querida H. Poulain queda desecha y maldice. Maldice a todas las viejas putas y busconas del mundo, maldice 7 veces a la fulana que con artimañas sucias, le robó el amor de su hombre, lo maldice a él por ser tan superficial y fácil como todos; pero en secreto, se maldice a sí misma por pensar que se merecía la oportunidad de enamorarse y ser querida.

 ¿Qué opinan retozones?


[Comenzado como borrador alredor de la primera semana de mayo, terminado el día de hoy.]

Cómo hacer una buena mamada.

Señoritas; he aquí lo que estaban esperando, una guía resumida de este finísimo arte. Quisiera decir que está redactada por una experta en la materia, pero el halago en boca propia, es pleonasmo; así que no lo diré.

Como todo en las artes amatorias, una buena mamada, necesita de un escenario idóneo y de cuando menos, dos participantes. Búsquese un rincón cómodo, una parejita querendona y encárguese de que sepa a lo que va, desde un par de días antes. El erotismo está cimentado en las pequeñas esperas.

En este caso, supondremos que ustedes tienen una casa sola, están viendo una película: de autos, choques, nenorras y balazos. Supondremos que usted eligió un brillito labial muy coquetón que hace que esa boquita suya se vea mordisqueable. Sin hacer ningún tipo de comentario sobre la peli, arrejúntesele un poco al muchacho, que probablemente estará embobado viendo sangre, fuego o cualquier otra cosa que brille y se mueva. Dele un besito en la mejilla, cerca del mentón, pásele otra chela (o trago de su preferencia) y al momento de dársela hágale cualquier roce en el brazo y póngase un poquitito melosona. Cuando la peli haya terminado, o esté en la fase aburridona, al poco se da el besuqueo, el fajorreo, el manoseo y... el chaqueteo. Hora de bajar los cierres. ;) Es justo aquí dónde empieza el arte: calcular el momento adecuado para que suene su celular (el suyo de usted, señorita) solicitando su presencia ur-gen-te en otro sitio, acomodarse rápidito la ropa, y no aceptar pretextos: largarse a la brevedad, y dejar al muchacho con la erección al aire y las ganas de que se la chupen.

Esas sí son mamadas ¿qué no?

Es difícil.

Porque el amor, es una cadena de coincidencias imposibles. Porque la libertad duele y cuesta mucho. Porque somos ciegos buscando la luz. Porque el tiempo jamás está de nuestra parte: la persona correcta, llega en el momento equivocado; la oportunidad perfecta, llega cuando no quieres tomarla.
Porque se necesita romper la esfera de la seguridad para saltar a un vacío. Porque aprendimos que duele. Porque la primera vez, jamás es la definitiva. Porque somos un eterno comienzo que se arrastra a sí mismo.
Duele por que amar es ser y dejar de ser; y después de muchos años y corazones rotos, lo que menos queremos es volver a perdernos.

Para amar en pareja, se necesitan dos: a veces uno está disponible, y el otro no está dispuesto; estamos dispuestos pero perdidos, ocupados, abrumados.

La verdad que el amor es para el tonto, o para el valiente, para el sincero... para los que no saben tener miedo, o saben amarrarlo y disfrazarlo de coraje. El amor es una aventura y no todos los corazones se sincronizan para dar el salto.

Por eso no basta una caricia, no basta una mirada, no bastan esas horas de complicidad y charla, ni la compatibilidad: todo es cuestión de un segundo de suerte, un silencio perfecto, una sincronía incomprensible que va más allá de nosotros.

Creo que el amor es magia, y no todos podemos jugar con ella: por eso jugamos a enamorarnos; creemos que nos entrenamos, pero todo es cuestión de suerte. Al menos hoy, es lo que parece.


Dedicado con amor a todos los que estos días han intentado jugar, han recordado sus juegos, y han apostado a jugar de nuevo.

Soltería incurable

Hace unos días leí en el facebook que los bebés se comían a las mamás; nada más cierto ni triste: en cuanto tu mejor amiga se vuelve madre, se transforma en algo incomprensible o desaparece. Lo mismo pasa con el mejor amigo que se consigue una novia que absorbe todo su pensamiento, o con la amiga que se obsesiona con sus ligues y sólo recurre a ti en periodos asexuados...

Hoy me toca hablar de algo harto doloroso: la brecha entre los solitarios y los que bien o mal, tienen "por quien vivir", con quien compartir la vida, o ya de perdida, quien les cobije la soledad. Es un tema difícil, le suplico a todo lector, que no se lo tome personal.

¿Qué es lo que separa al "mundo feliz", de aquella pálida existencia de los solitarios? Vamos por etapas: de los 15 a los 21, decir que uno es soltero es prácticamente un pleonasmo; pero entre los 17 y los 20 años, tus amigos "menos vivos" comienzan a formar desafortunadas familias accidentales; entre los 20 y los "veintitantos" comienzan a casarse por ganas... total que, para los 26 ya tienes algunos tantos amigos casados, preñados, con hijos o que viven felizmente en pareja; pero... ¿qué pasa cuando eres de los que están solos? peor aún, de los que están infelizmente solos (porque son cosas muy distintas).

Lo primero que me viene a la cabeza es que después de darse cuenta de la propia -e incómoda- soledad, una comienza a preguntarse el por qué: ¿será que una se lo ganó y es un castigo de dios (o una patada del karma) por haber sido mala con ese chico a los 15 años? O quizá porque eres una idiota que dejó partir al amor de su vida, pensando que "a la vuelta de la esquina siempre habría algo mejor".

Después vienen los horrores de la edad a agravarlo todo: que tu piel comienza a secarse con nada, ya no es tan suave, se va viendo guanga y mantener el tono muscular, requiere un esfuerzo extra que te agota cada vez más... el abdomen cada vez asemeja más una panza y etcéteras; te das cuenta de que la abuela te mintió y tus hormonas jamás llegaron a la estabilidad, aún tienes esos malditos brotes de adolescente cuando te viene la regla; el cabello comienza a ser una preocupación, no deja de caerse y también se sec...todo en ti se seca. Las crisis de tu apariencia llega a un grado tal, en el que te deprimes de muerte si pasas por una obra en construcción y los albañiles no te gritan obscenidades: te consuela que un camionero te grite "reinita" cuando cruzas la calle, o que un taxista libidinoso, te haga una seña de "súbete". Resumen: te das cuenta de que la juventud no es eterna y antes de que puedas disfrutarla, tu decadencia ya va en avanzada. Pa colmo de males, estás sola. Mariquita es menos guapa que tú, pero lleva 1 año casada con el que por años fue su novio feo -y naco-, están muy enamorados y él la quiere aunque no tenga nalgas; a la muy dejada no le importa su cabello mal teñido y eso te revienta, porque a ti nadie te da un besito por la mañana. Cuando Mariquita te llama para ir de compras, le haces berrinche y dices que no vas a ir a ayudarle a elegir cosas para la cocina; que prefieres ir a ver lencería. Claro, te siguen dando celos.

Si eres hombre (me había olvidado de los hombres), las jovencitas, comienzan a decirte señor o si te miran atentamente, es para después reírse de que "eres un ruco verde". Te das cuenta también, de que el pendejo que preñó a Mariana hace 5 años, y en palabras tuyas "echó a perder su vida", ahora es 15 veces más estable que tú y tiene un hijito que lo ama, lo necesita y hasta lo admira... y que aunque la Mariana ya no está tan guapa, lo quiere chingos y lo espera todos los días en casa. A ti sólo te esperan tus peces, tu tortuga, el gato que quiere comida o las cucarachas de tu "indigna vivienda".

Hombre o mujer, comienza a dolerte que el sueño hippie se te vaya a la mierda; que andar de "picaflor" haya dejado de ser divertido hace no sé cuantos ligues, pero sigues repitiendo por mera compulsión u olvido de cómo hacer las cosas de diferente manera; también porque has perdido la fe en ti para relacionarte con los demás de una manera afectiva y sana. Pero, en las reuniones sociales, la cara es otra: no vas a hablar de lo miserable que te sientes al ver tu celular lleno de mensajitos de gente a la que habrás olvidado en dos meses -y de la que ni vale la pena hablar a las dos semanas-, al contrario, las presumes, hablas de que no has perdido el toque y de que tu soltería es lo mejor que podría pasarte. "No ha nacido el hombre que pueda conmigo", "ninguna mujer puede amarrarme". En público no necesitas pareja, no señor; y eso de tener hijos antes de los 50 es para "mediocres que no buscan ofrecer lo mejor a su descendencia". Huevos qué, yo sé tu secreto: cuando te pones pedo solo (a) o con algún desconocido, lloras porque tu vida no es lo que te platicaron que sería, aunque te resistieras.

Recuperando el punto: estan los emparejados y los solteros (que ya pintan pa' solterones). Entre estos hay diferentes categorías los padres/madres solteros -un limbo, no sabes en qué categoría ponerlos, pero aquí, soltero será el que no tiene compromiso alguno ni gato que lo arañe-, los noviecitos eternos, los que ya se casaron, los que ya tienen familia y los -escasos- como tú, que llegan solitos a las fiestas o van con "una amiga" (o un amigo) siempre diferente.
Después de haberme aventado 4 párrafos sobre soledad y crisis de edad, ahora hablaré de incompatibilidad, según yo, aquí se intensifica el dolor: de repente, la gente que te ha acompañado por años ya no está dentro de la misma esfera que tú; poco a poco las pedas con tus amigos de la U, se vuelven reuniones de parejas; tu mejor amiga, ya no puede quedarse chateando hasta tarde, porque tiene que llevar al chamaco a la escuela, y tu mejor amigo ya no te cuenta historias divertidísimas sobre sus ligues de fin de semana, es más: ya ni salen porque hace meses que vive con su novia, quien no se cansa de insinuarle que eres una mala influencia. Te conviertes en el recuerdo ambulante y pseudoviviente de "los viejos tiempos".

Además de no tener pareja, de repente ya no tienes "compas", y curiosamente, tus nuevos amigos son cada vez más jovenes... y si sigo escribiendo: me suicido.

Uno por encargo

Uno por encargo
Aquí sí le cumplimos!!!
Respondiendo a la petición de nuestro afamado Anónimo, trataré de hacer una entrada acerca de Las Mandadas a la Verga [a lo largo de este texto usaré la expresión tal cual lo mencionó el susodicho]. Y digo trataré porque, por fortuna o por desgracia, no soy experimentado en el tema.
Según yo me pongo muy maduro, y trato de creer que lo ideal es que las mandadas a la verga no existan, sino que las personas llegamos a acuerdos:
No, pues es que mira, yo ya no me siento a gusto con la relación yara yara, no eres tú soy yo yara yara.
Así que, de mi parte, no recuerdo haber "mandado a la verga" con toda la extensión (chin parece albur) de la palabra, sino que según siempre hemos quedado en términos muy civilizados. Claro, ya a mis exes les tocarña decir lo contrario. Sin embargo, digo... ejem ejem.. EMPERO (aaah, cómo me gusta usar esta palabra) hay, por lo menos, una vez en que sí me mandaron a la verga!!!
Por qué, nunca lo supe. Alguna vez dijo algo como: No soporto que haya dos arcoiris y no estés tú para verlos conmigo. No estoy inventando, neta sí dijo algo como éso.Pero para esto tuvieron que pasar distintas cosas.
Al parecer la relación estaba chida; por mi parte le eché ganas, cosa que hacía años no hacía. Pero ella, en algún momento, decidió que no-nel-nimadres.A la mejor le sacó al compromiso, lo que sea. La cosa es que, de pronto, dejó de hablarme/responder mis llamadas. De pornto dejó de leer/responder mis correos.
Así nomás. Caput (no sé cómo se escribe y, en este momento, no me interesa hacerlo bien, de güebos, dijeran mis compas). Y de esa manera estuve sin saber qué pasaba, desde Julio hasta Diciembre.
Claro, no soy tan menso, al cabo de 3 meses entendí que ella no quería seguir con nuestra relación, pero tuve que esperar 3 meses más para poder hablar del asunto con ella que, como dije, me salió con esa jalada.
Y bueno, es la única vez que yo recuerdo que me hayan mandado a la verga.
Que yo haya decidido terminar una relación pues lo he hecho varias veces y siempre es difícil. Excepto una, que fue por mútuo acuerdo. Del tipo: andamos valiendo, verdad? Simón. Ton's, ai' que quede, te parece? Seh!
Sin embargo, terminar con una relación es algo sensible. Uno le saca a lastimar a la persona que besó en los labios.
Pero lo peor son las relaciones que no "terminan" pero que ya que terminaron hace tiempo.
Alguna amiga me mecionó que estuvo en una relación de 2 años, pero que chidos chidos nomás estuvieron 3 meses -los primeros.
Y justo escribo esto cuando suena "Siento que te estoy perdiendo" de Luis Eduardo Aute, que "ilustra" lo que quiero decir.
Pero en la opinión de much@s: Las relaciones hay que acabarlas de una vez.
Y la neta no está así de fácil. Haría falta ser muy binario (esto es, de Sí o No como únicas alternativas) para tomar determinaciones tan drásticas y, por lo demás, sanas.
Pero, como dijera la Srta. T: es más fácil de asimilar una relación que termina de golpe que una que termina paulatinamente. O algo así.
Por otro lado, hay algo que da todo un tema (ya expuesto en La Hormona Retozona): No tengo que amar a alguien sólo porque me ama.
Chin, ya no sé bien lo que trato de decir. Mugrosas chelas.
A parte, hay como que maneras de terminar una relación.
¿Cuáles has aplicado?¿Cuál es tu favorita?¿Cuál te han aplicado?
Supongo que la medida en la que duelen es en proporción al cariño que uno tiene.
A veces, dicho cariño lleva a la negación.
A: Yaaaaaaa! Déjame en paz, ya no quiero verte nunca más!!
B: Pero... ¿podemos hablar por teléfono?
A: Yaaaaaaa! Desaparécete de mi vida
B: ¿Cómo, o sea, ya no quieres que te acompañe a tu casa?

¿Carece de motivación, joven?

“Jalan mas un par de tetas, que una yunta de bueyes.”

(dicharrajo popular)

Me va a doler

Esto es algo que me contó una amiga:

Resulta que estaban en una como fiesta de chicas

y al rato llegaron chicos varios

más al rato se armaron parejitas varias

y subieron a distintas habitaciones a hacer cositas varias

de modo que al final tan sólo quedaron mi amiga y un vato

el vato, bien prendido: ah qué caray, pues ya nos quedamos solitos, no?

y ella neutral: ajá

y así, el vato tirándole la onda y ella quesos quesos, dándole avión, como dicen

hasta que ella se enfada y le dice que ya se tiene que ir

y él, muy galán, le dice:

'ira, mami, no te vayas; es que... pues tú no sabes, los hombres tenemos que desfogar si no luego nos duele bien gacho. En serio, mamita, no te vayas, me va a doler.

Noviazgos.

Sí, una lista más. Esa obsesión por categorizar, calificar y descalificar. Búsquese en la lista, encuentre a su pareja actual, a sus parejas del pasado; como siempre pedimos: coopere con el acervo hormonoso, al citarnos sus propias categorías.

Parecen estar en masculino, pero tómelos como neutro, adáptelos al género de su preferencia. Arranca:

El Ornametal

Nomás porque está guapo. Por lo general lo sacas a pasear y lo presumes. También es común tener fotos de él donde salgan besándose o abrazados puestas de gualpeiper o en tu celular. Casi nunca dejas que conviva con tus amigas por miedo a que te lo bajen pero más por pena a que se den cuenta que está bien wey. No te la pasas súper con él y a veces te aburre, pero todas te lo envidian.

El Premio

Le gusta a tu "amiga" y se la pasa hablando de él. Tú por lo general no le ves lo padriuiris pero se te ocurre que se lo puedes bajar... Y LO HACES! Na'más, por el mero gusto de habérselo bajado.

La chequera

Para que pague todo por ti.

El palancas

Porque es influyente, y qué hay mejor para presumir con tus amigas que andar con el que decide tal o cual cosa. No importa si te ayuda a ti directamente o no, lo importante es que es el sobrino del presidente municipal, hijo del dueño del antro de moda o lleva cualquier apellido "ilustre".

El Rockstar

Na'más porque es popular y te ayudará a saltar a la fama. Es del que puedes presumir "es mi novio". Incluso, su rockstaerismo es tal que perdura y sigues diciendo "anduve con él".

El curita

No el religioso, es quien te aliviana después de un madrazo. Y como toda bandita: si te la dejas mucho tiempo sobre la herida, te la pudre.
Son relaciones que deben ser cortas, y de las que comúnmente, ninguno de los dos sale bien.

El intermediario

Lo usas para llegar a conocer a otro que te gusta, ya luego te limpias los mocos con él/ella y clavas el colmillo en tu víctima inicial.

El chido guan

Sí, ese... con el que te quieres quedar toda la vida; que tiene la sonrisa perfecta, ese olorcito que te deshace, que siempre sabe que decirte y qué callarse, blah, blah, blah.
(Si esto termina, quedas pendejo por un BUEN rato)

El consolador

Para que te dé orgasmos y la sensación de que "no estás solito en el mundo". La relación se basa en tener orgasmos. Es común que después de tener tu orgasmo, el de él no te interese.

El mayordomo

Amor, se me antojan unas palomitas. Y él te las traerá. Amor, me llevas al súper? Y él te llevará.

El por nomás

Existe, basicamente, por tu propia intolerancia a estar sola. También se le conoce como el-peor-es-nada. Típicamente se le rompe el corazón al terminar la relación.

El de antonomasia

Es el vato que siempre ha estado ahí. Cuando estabas destruída porque tu novio te había terminado, él estaba ahí; cuando te sentías acabada por que te reprobaron en mate, él estaba ahí; el día que te dio chorrillo, él... te llevó un pepto bismol. Con tus amigas y pretendientes, te refieres a él como tu amigo, pero sabes que le gustas y quieres que siga siendo así. Un día decides "hacerle el favor" y "lo dejas" andar contigo, sólo para descubrir que nomás lo quieres como amigo.

El espejito

Verdad que no hay mujer más bonita que yo?

Por obligación

Para que tu mamá deje de pensar que eres lesbiana y/o para que tus amigas te inviten a las salidas de parejitas.

El de moda

Le gustaba a todas, menos a ti, pero a él se le ocurrió que eras tú quien le gustaba y no es posible resistir la tentación de tener "lo que todas quieren". Puede ser "ornamental".

El "secretito"

Por alguna razón, aunque te gusta, no se te hace como pa' presumirlo o compartir "la dicha de estar a su lado", y prefieres que nadie lo conozca. También, de ser posible, que nadie sepa que sales con alguien.

El Clon

Nomás porque es igualito a alguien que nunca jamás te pelo, o te mandó a la chingada; en ese caso, los clones, pueden ser "curitas".
Weee, tu nueva novia se parece un chingo a... (la que te dejó hace 6 meses)

Pus nomás

No sabes ni de dónde salió, y pa' cuando te diste cuenta ya andaban.


El de desquite

¿Tu noviecito y tú, terminaron feo? Te echas a uno de sus amigos; entre más cercano, mejor.
¿No tienes conflictos con los "cambios de identidad sexual"? Le bajas a su nueva pareja.
¿Te rompió el corazón y tiene un hermano con el que siempre compite o uno de sus padres es guapo?; bien sabes lo que hacer.
También puedes salir con aquel que siempre te acosó mientras andaban, de quien él siempre sospechaba y tú insistías en que no se gustaban. Sí, justo con ese que le cae tan mal.
¿Te bajó al novio? Le rompes el corazón a su mejor amigo, hermano o lo más cercano que encuentres.
Alternativas hay muchas, pues... nomás andas con él para chingar a alguien, a según.

El Chof

Te gusta su auto, y que lleve a tus amigas y amigos en él.

El Siamés

Siempre se les ve juntos, en todos lados, haciendo lo mismo.

Chico Malo

Seguido se mete en líos. No lo quieren tus amigos, no lo quieren tus papás, tus hermanos están pensando en mandarlo matar, tu perro lo muerde, pero él es tan guapo y tan lindo contigo... Además, tú puedes hacer algo para que saque todo lo bueno que hay dentro de él, descubra que en realidad no es la cochinada que todos dicen que es (?) y pueda ver lo hermoso que tú ves en su mirada (!).


El mutante
Cuando comenzaron a andar, era lindo, tierno, educado, maravilla, ma-ra-vi-lla. Pero poco a poco, se ha ido transformando en una cosa horrible que no reconoces. ¿Lo habrás alimentado después de la medianoche? ¿le cayó agua? Quien sabe, pero mutó.


Por los viejos tiempos
Te gustaba en alguna remota época de tu vida; un día se encuentran y comienzan a andar, pero de repente te preguntas: ¿por qué me traía arrastrando?


El naufrago
Recién salió de una relación tormentosa y le pareció que podía asirse a ti, para no perderse en el mar de la soledad; y claro, tú lo viste tan devastado y desprotegido... que no podías dejarlo ahí, solo, pa' que se ahogara.


El aprehensivo
Empalagoso, hasta la madre. A veces, prefieres esconderte por días y apagar el teléfono, para que crea que has muerto (porque eso es lo que cree que ha pasado si no contestas al cuarto ring-ring); pero cuando lo haces, aparece preocupadísimo en la puerta de tu casa. Puede volverse fácilmente un "Si me dejas me mato".


El psicópata
La versión hardcore del aprehensivo; con el plus de qué tiene conductas extrañas y, a veces, hasta te da miedo estar a solas con él, porque entre más lo conoces, más cosas raras saca.



Si me dejas me mato
Chantaje, drama, asco, reconciliaciones patéticas porque "el pobre se veía muy mal sin mí". No hace falta más explicación, ¿o sí?

Si me dejas te mato
Es mi favorito: Sin chantajes, sin melodrama: aquí la violencia es pura y el juego psicológico explícito, a la primera que te quieras salir del huacal va el primer madrazo. Así se hace, control, dominio, pistola en la nuca de tus padres.


El buen vino
A la Humpbert Humpbert o a la Demi Moore: tenía como el doble de tu edad... ¡Pero qué belleza! ¡Qué galantería! ¡Qué porte!


El optimista
¡Yo sé que muy pronto llegarás a amarme!

Turirú

¿De qué sabor se les antoja el siguiente post?

Bara bara, bara bara!

Amiga retozona, amigo retozón!

¿Tienes alguna aventura que te gustaría compartir? ¿Nuestras historias son nada comparado con lo que te hapasado? ¿Hay algún tema que te gustaría desarrollar, o que desarrolláramos nosotros? ¿Alguna pregunta escabrosa que no te atreves a preguntar?

LA HORMONA RETOZONA es tu lugar!

Desde hoy puedes enviar todas tus dudas, historias macabras, narracioes tiernas, observaciones y reniegues!!!

Los mejores serán publicados y premiados ;)

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¡Me lo ganaron!

Muchos habremos pasado por eso de haberle echado el ojo a alguien y haber llegado incluso al ligue descarado entre ambos, sin haber consolidado NADA más que insinuaciones.
Es una situación en la que tú #1, le coqueteas a #2, y hasta te vas enamorando poquitín y buscas el modo de ser material enamorante. Después de un rato, saben que se gustan, se traen ganas y quieren algo; nomás que por X o Z, aunque ambos saben que se desean mutuamente, no se hace nada... muchas veces porque alguno, no sabe exactamente qué quiere. En ese momento, aparece súbitamente un tercero #3 que se anima a tomar posesión de #1 (o a enamorarlo, pa' que no se escuche tan feo) y lo arrebata de esa indefinida pareja mostrando mucha más decisión que el otro prospecto.

Ojalá aquí acabara la cosa, pero apenas comienza. En el mejor de los casos la relación entre #1 y #3 se desarrolla linda y saludablemente, #2 queda como un asunto del pasado, y el fin de la relación, cuando acontece, no tiene nada que ver con #2.

Otra variante es que #1 y #2 se mantengan como buenos amigos a ojos de #3, pero en el fondo ninguno ha renunciado a la idea del otro, por lo que #3, se vuelve un "personaje incómodo" de la historia y sale bailando.

La tercera variante, que es la que me interesa desarrollar en esta entrada, comienza cuando llega #4 y conquista el corazón de #2; mientras que #1 y #3 siguen en feliz pareja.
Durante este tiempo, #1 y #2 mantienen una amistad o pierden el contacto, hasta que se da un punto en el que todos se quedan sin pareja y el azar o la necedad, vuelven a juntar a nuestros personajes #1 y #2, que comienzan con un eterno estira y afloja, del que sabe Dios cuándo se libren: se ven en plan amistoso/reconocimiento, después en "ligue meloso", posteriormente en ligue descarado y muy probablemente lleguen a enfrentar más de una vez alguna "cruda moral", después de algún exceso alcoholico, tóxico o sexual.
Inclusive, se dejan ver juntos, pero nunca inician con una relación (entiéndase relación como se quiera), luego... cuando #2 , está "doblando las manitas" y "parece que ya se va a armar algo" ¡Zaz! Reaparece #3 o bien, un #5... que deslumbra a #1 , guiándole al inicio de una nueva aventura amorosa/sexual. Mientras que #2 se queda "chiflando en la loma", hasta que se encuentra con un #6 o vuelve con #4...

Así, en números pares e impares que pueden llegar al infinito, se dibuja esta historia, en la que #1 y #2, viven un romance intermitente, atascado de promesas de amor, fantasías sexuales, y frases que comienzan con "algún día... " y terminan con algún verbo conjugado en primera persona del plural.
Después de un rato de eterno "y si...", de coincidir más de una vez #1 y #2 en un momento sin pareja y vivir el fracaso #N del nacimiento de su idilio romántico, alguno de los dos deberá comprender que la cosa está podrida o bien... aceptar esa relación como una amistad de "saving grass" (Pa' no sentirme tan sólo cuando me mandan al diablo) o admitir que siempre estará ahí, como un eterno monumento a la propia necedad.


#1 Y #2 son un amor inconcluso, una promesa al viento: una gelatina mal cuajada, e insípida, que sólo se nos sigue antojando, porque alguien nos prometió que sería nuestra, pero que estará permanentemente en el aparador.


Como dije una vez:

Lo que no cuajó a la primera, ya no cuajará jamás... pero siempre estaremos esperando a que agarre consistencia.

¿Ustedes con qué nombre bautizarían una relación así? ¿Se puede tener más de una?

No es facilidad, es practicidad.

Imagen tomada de xkcd.com

No es que sea fácil, sólo que una vez que sé lo que quiero,
no me complico para conseguirlo.

Pendientes.

Yo debo un post en este blog, sobre las "idas y venidas" de las muchachas, no es que no me acuerde... nomás no ando inspirada. Ya ven, dicen que primero hay que predicar con el ejemplo y después hablar, no sea que una termine mordiéndose la lengua sola... Así que el post esperará, esperará y esperará por los siglos de los siglos, amén. (O hasta que alguien me de una ayudadita)

A falta de

Pues parece que los retozones andamos: o muy ocupados dando rienda suelta al mandato de la hormona, o de plano muy deshormona'os. Lo dejo a su criterio, haga su quiniela....

Entonces, a falta de entradas largas, invadiré La Hormona Retozona con notas pequeñas, resúmenes de reflexiones, sabiduría condensada. Siéntase Siéntese y disfrute...

El amor sin sexo, es como un KinderSorpresa
que viene sin juguetito adentro.

¡Ya se viene!

-¿Quién se viene?

-Pues la muchacha, sí que sí...

-¿Qué quien, qué?

-¡¡Se nos viene la muchacha!!

-¿Pero, qué muchacha? ¿Por qué se viene?

-Pues porque quiere.

- Y ¿pa' qué, oiga?

- ¡Ps cómo qué pa qué! ¡No le haga! A ver, ¿pa' qué come usté?

- Pos pa' quitarme l'hambre... ¿qué no?

-¿Entonces?

-¿'Tons qué?

-Pus, pa' quitarse las ganas de venirse.

- Ah, fíjese ¿Y qué muchacha, oiga?

-Pus usté diga.



---

Y ps, pronto vienen algunas cosillas que he aprendido... Sobre muchachas, muchachitas, muchachonas y lagartonas, que se vienen y que quieren regresar.

El cerebro de las mujeres trabaja mejor con semen.

La ciencia ha comprobado, que el semen juega un papel preponderante en el desarrollo de la inteligencia humana, estudios abren la posibilidad a que se le considere como el l "portador" de la misma, el alimento primordial del cerebro. Estudios afirman que los hombres son más pendejos después de eyacular, mientras que las hembras parecen tener mejores ideas después del coito con orgasmo.

La investigación de campo, desarrollada en una muestra de 200,000 adultos, arrojó como resultado que las mujeres que mantienen relaciones sexuales con relativa frecuencia, se desempeñan mejor laboral y socialmente, alcanzando mayores logros intelectuales que las compañeras vírgenes o malcogidas. Esto explicaría por qué mujeres que son vistas como "idiotas" por el género femenino, pero atractivas por el masculino, obtienen ascensos laborales sorprendentes:
-"La razón, no es que les hayan regalado el puesto a cambio de un acostón. La realidad indica que ellas se nutren del fluído y obtienen -casi vampirescamente- la energía mental de los hombres, lo que las hace mucho más competentes que el resto de las compañeras. - Reporta el Dr. M. V. Gota, puntero del proyecto.

El término "cabeza hueca" parece cobrar validez, al comprobarse que el intelecto femenino aumenta proporcionalmente a la cantidad de semen vertido dentro o encima del cuerpo femenino.
Acualmente, el estudio se dirige a determinar si la felación es más efectiva que el sexo pene-vagina, dada la cercanía de la boca con el cerebro.

sexos, parte 1

A lo largo de mi ridícula y 99.99% satisfactoria vida sexual me he encontrado con diferentes clasificaciones, quiero saber cuántos más hay aunque no me interese experimentarlos todos. Como nota aclaratoria, no todos los sexos mencionados son sexos consumados, sólo acontecimientos físicos de alta intensidad que involucran la sexualidad de una, dos o más partes, sin que haya coitos o felatorismos o cunilingus efectuados, pueden ser simples fajes gozosos o manoseadas de distinta intensidad. Ni todos son experimentados por mí, algunos, me los han contado o "le han pasado a un(a) amigo(a)".

Expongo a manera de lista explicada, a según me dé la memoria y la ocurrencia sin un orden específico.

a) Sexo a lo pendejo. Cuando no sabes ni lo que haces ni lo que quieres hacer, pero de repente estás involucrado en un revolcón macizo, normalmente bajo la influencia de alcohol y/o drogas y en un estado emocional-mental de putrefacción e insipidez, con alguien que a) no sabes de dónde salió, b) sabes de dónde salió pero no sabes ni como llegaron al punto de "perderse el asco". El resultado puede ser bueno, indiferente o malo, normalmente la segunda y la tercera predominan. Al no tener siquiera la intención firme de tener sexo y descubrirte en medio de algo de lo que tenías ganas sin mucho deseo te sacas de pedo y dices: chingue su madre el diablo, a ver que sale.
En este caso, son frecuentes las crudas morales y caer en el: no quiero volverte a ver (en caso de que sea un desconocido o semiconocido) o te dejo de hablar un buen rato (en caso de tratarse de alguien conocido que por algún maldito azar terminó metiéndote mano. Generalmente, después de estos extraños episodios recurres al "finjo que jamás te he visto o que no te conozco". Las burlas de la banda que se enteró, son frecuentes.

b) Sexo por compromiso. Normalmente cuando tienes una pareja que ya te da algo de hueva, sea pareja estable o free: tienes con quien y tienes ganas aunque no sean precisamente ganas de esa persona. Las condiciones están dadas y los condones en el buró. Coges, con automatización y hueva. Puede o no haber orgasmo, normalmente se carece de satisfacción verdadera. Es un acto normalmente egoísta en el que el otro se convierte en un dildo humano o en lo más parecido a una vagina en lata que puedas imaginar. Sobra decir que te vale soberana madre si la otra persona está satisfecha o no, salvo por vanidad, que siempre prepondera. Digamos, tu técnica tiene que ser buena, nomás por ego, no por compartir experiencias, mucho menos por satisfacer nada que no sean tus ganas de quitarte esa molesta sensación de excitación y/o ansiedad.

c) Sexo a la fuerza. Es feo y normalmente traumático, a veces el acercamiento es voluntario pero no al 100%. Muy común en los casos de estupro, incluye manipulaciones psicológicas y "logísticas" de la situación. Generalmente se recurre a la fuerza física y el chantaje emocional. Si ya empezaste, terminas. Obviamente acaba mal y deja a los individuos con una sensación de asco y confusión.

d) Primer amor con sexo, o primer sexo con amor. Es ese que peca de cursi y satisfactorio. Te da chance de conocer y conocerte, experimentar y descubrir, el clásico de la entrega total, semi inocente, semi obsceno, enajenante y abrasador. No hay complejos ni miedo., todo es placer, seguridad, ternura, satisfacción y felicidad. La unión física, psíquica y emocional de las partes es prácticamente absoluta. Marca a las personas positivamente y lo recuerdan para toda la vida como una experiencia grata e irrepetible y lo es, la primera vez que te sueltas, es digamos la única, puesto que el corazón lleva una especie de inocencia que después de esto se pierde y se convierte en otra cosa rara. Lleva implícitas risas, travesuras, juegos, excesivo arrumaco y palabra amorosa, enajenación, pérdida de contacto con la realidad y de una manera u otra sienta la base con la que compararás (quieras o no) al resto de tus parejas sentimentales-sexuales. Te hace entender ese rollo de que el sexo es para compartir y no es sólo para ti, te preocupa tu satisfacción y la de tu pareja, a veces incluso hasta más que la tuya. Prácticamente todos recuerdan los orgasmos propiciados por estas experiencias como los mejores de su vida, ya que vienen completos física y emocionalmente. Se rumora que la ternura y entrega que se alcanzan en estas relaciones, es difícilmente superable en un futuro.

e) Sexo por casualidad. De repente, con alguien que ni te la creías surge una chispa química extraña, complicidad y calidez que se transforman de repente en lujuria, si bien no es un acto egoísta, no estás emocionalmente comprometido como una pareja con la persona en cuestión. Suele darse entre amigos o entre personas que se acaban de conocer y hacen un click muy "guay" y no tienen esa "química de pareja" como para que el encuentro pase de ahí. Los encuentros pueden repetirse o no. Generalmente son ricos y divertidos, debido al factor sorpresa, cuando este se agota, se pasa a cualquiera de las otras categorías.

f) Sexo por piedad. Te encuentras con alguna persona desesperada por un poco de cariño, la manipulas y te la echas al plato. A veces él/ella lo sabe y a veces le importa, a veces no. Muchas veces se te agradece y se te odia en la misma medida. La alevosía puede arrancarte sonrisas realmente sinceras o un poquitito de culpa.

g) Sexo clandestino. Con alguien con quien no deberías coger, puede mezclarse con las categorías a, c y f. La intensidad de esto es directamente proporcional a la sensación de riesgo, ya sea por la persona o el lugar, ejemplos de esto son: al amigo de tu hermano (a), a la pareja de un amigo (a), en algún rincón en dónde pudieses ser fácilmente encontrado(a). En muchos casos, fuera de estas situaciones, la pareja sexual no disfruta igual los encuentros.

h) Sexo con cariño. Con alguien a quien quieres y te gusta, pero no puedes entregarte completamente. Puede haber chispas y fuegos artificiales y los orgasmos están presentes y son altamente satisfactorios, pero no hay unión en "todos los niveles". Puedes o no estar enamorado, nomás no te sueltas completamente en el plano mental y emocional, mucho menos en el espiritual. Casi podrías compararlo con el sexo con amor, pero algo le falta.

i) Sexo con amor, en segunda vuelta. Prácticamente lo mismo que con el punto d, nomás que uno ya tiene más colmillo y se preocupa por otras cosas, entra en juego también la vanidad y la técnica. Como inconveniente tiene que de repente llegan a la cabeza flashazos intermitentes de otros encuentros, que se van disipando conforme se repiten los revolcones. Como ventaja tiene que uno técnicamente ya está más entrenado y mezclar perversiones ya no da tanta nervia.

j) Sexo con ex. Ya sabes a que sabe y es rico pero no te sabe igual que antes del quiebre. La misma gata, pero revolcada, la segunda parte de una película (y todos sabemos que segundas partes, no son tan buenas, nomás se repiten los personajes), una bolsita de papas abierta, una barra de chocolate roto. Son relaciones de orgasmo prácticamente asegurado, porque la pareja en cuestión ya nos conoce y podría manejar hasta en automático. Sigue habiendo ese algo que había cuando andaban, pero ya no hay otros algos y la balanza como que se desconchinfla. Se saben todo lo básico, pero el otro puede haber aprendido nuevas mañanas en el inter. La extrañeza resulta del poco cambio en las técnicas y el mucho cambio en los planos emotivos.

k) Sexo de vuelta. Como el sexo con ex, pero cuando regresan. Chance de volverse a conocer, porque nomás ya no es lo mismo. Muchas veces mejora otras tantas puedes quedarte con el: ¿y por qué me gustaba tanto?.

l) Sexo viajero. No necesita explicación: se conocen, springbreaksean y adiós. Pueden darse varios revolcones durante la vacación y puede ser sumamente satisfactorio y enloquecedor si la química y las técnicas se acoplan, si no, pues es equis y nomás tiene a su favor el factor aventura. Pocos se vuelven a ver y aún menos son las parejas que se forman a partir de estos encuentros.

m) Sexo enajenante. Puede o no ser técnicamente perfecto, puede o no haber una química inmediata, puede o no encantarte locamente la otra persona, puede o no darte el orgasmo de tu vida, pero nomás no puedes parar y quieres repetir y repetir y repetir con esa persona valiéndote madre aclarar los puntos anteriores. Te picas y no puedes parar. En ocasiones se comparten parafilias o fantasías que se llevan a cabo de manera sorprendentemente satisfactoria. Puede o no haber amor, puede o no haber cariño (sí, de nuevo puede o no). Puede o no repetirse. Es parecido a descubrir una droga nueva y hacerte adicto. Puede iniciar como el punto d o como cualquier otro, tiende a volverse compulsivo y derivar en cualquiera de los puntos a, b, c, e, f, g, h, i, j, k. Satisfacerte y satisfacer son prácticamente la misma cosa.


Luego le sigo, coméntenle y ayúdenme a encontrar más.

Don Rigoberto Inside

Y ahí estábamos los dos, en un restaurante, sentados, frente a frente después de uuuuh de no vernos. Ah! Una morra me explicó esto:

No puedo negar que estaba emocionado de verla de nuevo, después de todo, es alguien a quien años atrás me quise trabar –o que nos trabáramos– pero no se hizo porque me resultó bastante conservadora y dijo –ya entrepiernados– que si no éramos novios que nanais. Ya mi buen amigo César me dio el consejo de “Wey, po’s nomás dile que sí, que muy noviecitos, te la coges y terminando: sabes qué, ya la pensé mejor, no creo que esto funcione” así que, agradecido de antemano, ya no hace falta que me lo hagan. Pero no, no es mi estilo, lo siento. Pues bien, estar ahí frente a ella hizo que se me despertara la hormona retozona alborotada por la posible posibilidad de que le diéramos a probar de estos nuestros huesitos (Qué chido y que sarra, las expresiones guarras ya me salen solitas; me siento liberado de tener que copiarlas siempre. Soy un creador) que tan abandonados andaban.

Ella pidió Pollo en salsa de… de… de algo que no recuerdo pero tenía un par de aceitunas. Yo no pedí nada porque ya había comido. (Aquí debo de confesar una tranza: Decidí estar ya comido porque sabía que si comíamos juntos tenía que invitarle la comida. Y como la cita era a las 5 pasado meridiano implicaba que ya no iba a haber comida corrida de a 30 pesos, sino comida a la carta que sumada a lo que yo consumiera pues haría que tuviera que gastar mucho más de lo presupuestado. Chale, me siento rata dientona de alcantarilla.)

Bueno, ella empezó a comer y yo trataba de concentrarme en sus manos pero… nooooo, no podía, comía bien feo, mascaba con la boca abierta, hablaba con la boca abierta, comía el pollo con las manos, separaba la carne de los huesos a mordidas, la salsa se le quedaba en los labios y no se la limpiaba, incluso le daba tragos (no bebía) al agua fresca con los labios llenos de salsa, hizo un desmadre en el plato, el mesero fue en reiteradas ocasiones a preguntarle que si ya le retiraba el plato y ella decía que no; yo no sé qué más le podía comer pero ella seguía empecinada chupando el huesito, hasta se comió la piel! –iaak! El sólo recordarle hace que me dé náusea–; Una vez que hubo terminado con el pollo, del cual intentó en fallidas ocasiones darme a probar, pensé que ya podría verla mientras conversábamos pero… le siguió con las aceitunas que mordía y chupaba y sacaba de su boca para ver dónde le había quedado carnita para después volverla a introducir en su boca y seguirla chupando, llegué a pensar que ya sabía por lo que yo estaba pasando y que lo hacía por pura maldad, pero no, ella es bien inocente, lo sé. Nunca se dio cuenta. Una vez que dejó relucientes los huesitos de las aceitunas pensé que lo peor había pasado, sin embargo, tomó uno de los huesitos y empezó a jugar con él sobre la mesa como si fuera una canica. En una ocasión la “canica” salió más fuerte y me pegó en el brazo… Sí! Un hueso de aceituna rechupado, manoseado, paseado por la mesa, me tocó el brazo. Ella dijo pásamela, ante lo cual sólo me limité a bajar mi brazo de la mesa. Entonces llegó –por fin– el mesero y se llevó lo que había en la mesa y ella… tomó un palillo y empezó a darle uso (esta parte no la describiré, me gusta mi teclado sin cosas encima). Afortunadamente una partecita pequeña en mi pequeño cerebro –el instinto de supervivencia, la neurona de la decencia– aún pudo salir del estado casi convulso en el que me encontraba y sugerir: Voy al baño y de paso les digo que te envíen la cuenta.

¿Qué significa ser atractiva?

Ah, Morra-de-la-que-estoy-hablando, si por casualidad llegas a leer esto te informo que no te aborrezco ni guardo rencor. Tan sólo evitaré que comamos juntos, pero todo lo demás está bien. Sabes que te tengo en alta estima.

10 consejos prácticos para darle en la madre a un corazón. Por tu amiguis Mar =]

1. Asegúrese de conseguir un corazoncito fresco*, que no haya sido despedorrado muchas veces. Los que están sin estrenar se quiebran más bonito (si pones atención hasta se escucha cómo caen los pedacitos como cientos de estrellas en un tazón de dimensiones cósmicas). Si el corazón en cuestión ya ha sido roto en reiteradas ocasiones el empeño que usted ponga en darle en la madre deberá de ser mayor; si el corazón ha sido roto antes por usted, le costará más trabajo cada vez destrozarlo, llegando incluso al límite de perder cualquier capacidad de dañarlo, haciendo estos consejos prácticos prácticamente inútiles.

2. Hable siempre en plural, no diga “cuando vaya a…” sino “cuando vayamos a…” ni “tú y yo” sino “nosotros”. Que parezca que son una unidad indivisible.

3. Asegúrese de fingir que entrega su propio corazón, de manera que el corazón a desconchinflar se sienta plenamente en confianza de ponerse de pechito por mera complicidad. Muy importante: dice “asegúrese de fingir” no vaya por ningún motivo a entregarlo de a devis pues entonces el corazón desmadrado podría ser el suyo propio de usted.

4. Mencione siempre planes a futuro, por más inverosímiles que parezcan, a la persona enamorada todo le parece posible; sin importarle siquiera que sean frases tan trilladas como: cuando vivamos juntos…, cuando nos casemos…, si alguna vez tenemos hijos…, a nuestros hijos…, deja que termine algunas cosas y ya verás lo felices que seremos, y un largo etcétera.

5. Sea cursi, claro, la cursilería debe ser diseñada para la persona poseedora del corazón a destartalar, es decir, no regalarle un Salchicha la Popó (Winnie the Poo) a alguien que se considera así mismo no-cursi, sino, por ejemplo la edición más cotizada de algún libro, o el disco más nuevo de su banda favorita, o una litografía o cosas así; de modo que crea que nadie más en el mundo es como usted de “especial” [teletonitis aparte]

6. Dígale Te Amo, déjese de tabúes baratos y sentimentaloides, no se sienta mal por decirlo aunque no lo sienta, todo es parte de un proceso. Recuerde que el objetivo es darle en la madre, entre más enamorada esté la persona a la cual aplica estos consejos más se incrementa la posibilidad de tener éxito. Que no le dé pena, nomás la primera vez es difícil pero dígalo pocas veces para que no le salga como decir buenas tardes, escoja los “momentos mágicos”.

7. Muéstrese fiel. Nada de mamaditas de “lealtad y fidelidad”, usted no se acueste con nadie más, ni mire a nadie más, ni se vuele ni vuele a nadie más, puede costar trabajo pero, repito, es parte de un proceso. (Si siente que no lo soportará y le dan ganas de mandar a la jodida este consejo pásese al punto 10a y 10b, aunque ya no me hago responsable de los resultados)

8. Enséñelo (este… puedes abrocharte el pantalón, no me refiero a eso), sáquelo a pasear, preséntelo a la familia, en la cena de noche buena, en el cumpleaños de mamá, que se siente integrado y comprometido, béselo en público pero no se atasque, preséntelo a sus amigos y, de ser posible, a su ex.

9. Auséntese por cortos períodos, de modo que le haga creer, sentir, que sin usted la vida no tiene sentido, y que no es nadie si no está a su lado. Debe además empeñarse en quitarle sus amigos haciéndole casi dependiente de usted.

10. Si ha seguido los consejos anteriores, en este punto, el corazón de zurrapar debe de estar listo, en sus manos, tibio, entregado, pleno, ciego, e-na-mo-ra-do. Justo donde lo queríamos para, por fin, darle en la madre. Ahora sólo le queda decidir si lo hace de un putazo, a rajatablas (10a.) o si lo hace lenta, dolorosamente (10b.).

10a. Este punto puede realizarse en público o en privado: para que el dolor sea mayor se recomienda la primera opción; en cambio, si lo que quiere es el deleite personal se sugiere la segunda. En privado, puede ponerse serio, hasta que llame su atención, después, mirando al suelo diga “es que…” aquí mírele fijamente a los ojos pero sin expresión y continúe “… ya no te amo”. En público es altamente recomendable hacerlo en una fiesta o reunión, donde la mayoría de los participantes sean amigos y/o familiares suyos, digo, para que no resulte usted linchado. Después recurra a alguna personas dispuesta y bésele y fájele procurando que sea notorio para todos y, especialmente, para la persona poseedora del corazoncito a fragmentar. Si todo reulta bien no necesitará decir nada. En caso de que dicha persona sea medio falta de piripituche se pondrá roñas e intentará aferrarse a usted… en privado. Para lo cual simplemente siga el procedimiento descrito arriba en “En privado” dentro de este punto.

10b. Sólo empiece por ignorar a la persona pero sin dejar de decirle Te quiero, o te amo a ti. Aquí ya se vale tener, por lo menos, un amante que debe disimular pero no esconder. No le llame. Diga “si quieres”, “como quieras”, “tú decide”, muéstrese desanimado y vaya a reuniones con sus amigos y familia pero sin invitarle. Así hasta que llore de desesperación, pero nunca se eche pa’tras, siga diciéndole te quiero, hasta que se harte y le diga un montón de cosas. Es muy problabe que intente hablar con usted en privado, para “arreglar las cosas” ante lo cual usted debe asentir en repetidas ocasiones y prometer que cambiará. Cuando ya no aguante más, ya sea por tedio o aburrición, entonces sí baje la palanca, apague el interruptor.

*NOTA: Uno debe de dar por sobreentendido que el corazoncito está dispuesto (no necesariamente disponible).

Que no le digan que no le cuenten:
A modo de Glosario Epilogógico.
Palabras usadas en esta entrada que vienen significando más o menos lo mismo. Cuasinónimos.
Darle en la madre
Despedorrar
Quebrar
Romper
Destrozar
Dañar
Desconchinflar
Desmadrar
Destartalar
Fragmentar
Zurrapar

Libre Transcripción

Desde el principio mismo me dice que sólo le interesa el más raro de todos los contratos afectivos entre hombre y mujer: El compromiso total, la fidelidad total, instantánea. Todo o nada des hoy, el corazón entero u olvídate. Eso es lo que está dispuesta a ofrecer y, si no puedo coresponderla, entonces que te vaya bien, me ha alegrado conocerte, sin rencores, adios. Su hija, dice, merece un poco d continuidad en la vida, no una procesión de hombres insuficientes en la alcoba de su madre; y lo mismo, añade, necesita ella. Cuanto más lo conozco, tanto más pienso que su absolutismo es heroico. El coraje intrépido del inocente --l niño que tiende una mano confiada hacia el fuego, el estudiante bromista que pone un sombrero de payaso a la estatua del tirano, el joven con su uniforme nuevo, soñando sueños brillantes de proezas heroicas, o la Belleza en el momento de su primera zambullida en el ozo del amor-- nunca me ha impresionado. Los novatos sin experiencia en la vida van hasta el borde y más allá por la cegadora inmensidad de lo que ignoran. Sin embargo, el coraje de ELLA es el de la experiencia, de ojos abiertos, magullado y temeroso. Rechazada por su padre y su familia, abandonada por el padre de su hija, con las heridasabiertas de sus amores rotos, está dispuesta, sin embargo, a arriesgar el corazón un vez más. A tratar de alcanzar lo mejor a pesar de que lo peor la aterroriza. Eso es bravura.

A modo de encuesta

¿Qué es lo más... lo más... [espacio para un adjetivo ad-hoc] que has hecho o que te ha hecho un(a) ex-pareja?

NOTA: El adjetivo en cuestión ha de oscilar entre psicópata, ojete, enfermo, culero. Nada de cosas bonitas.

La inteligencia es sexy

Estaba el Mar sentadito afuera de la escuela esperando el camioncito que lo llevaría al número 25 de la calle Palma donde lo esperaban unos cuantos cariñitos y un plato (por lo menos) de comida caliente; ambos cortesía de su madre santa enmascarada de plata.
Mar escuchaba una canción en unos audífonos, cuál? Ésta:

[poner la rola de cradle of filth así como le hacen Tania y Jorge]

Entonces cruzando la calle se acerca una muchacha que, en aquel entonces, le gustaba mucho. Ella sigue caminando y sigue acercándose. Mar esperaba (rogaba?) que en cualquier momento cambiara la dirección y tomara otro rumbo; pero no, la muchacha en cuestión se detuvo junto a él y se sentó a su lado. Mar se puso muy nervioso pero mantuvo la calma y se concentró en la música que escuchaba porque el deseo apretaba extrañamente y el acuerdo aparecía muy lejano -mugre Masio[link], no me influencies!- así que lo mejor era intentar ignorarla y concentrarse en la música.
En eso la morra le toca hombro y dice: labios moviéndose <-- Aquí imagínatela dentro de una televisión con el MUTE puesto, ejem, digo, imagínate que está en un video de YOUTUBE y tienes las bocinas apagadas (digo, hay que ser actuales).
Entonces el Mar se quita un audífono y dice: Perdón?
Ella: Que si qué estás escuchando
Mar: Ah, CRadle of Filth
Ella: ...
Mar: Es rock pesado <-- Pocas personas en la época y latitud estaban relacionadas con el término Metal para designar un género musical
Ella, extendiendo sus manitas hacia mis orejas: A ver
Mar le presta sus audífonos
5 Segundos pasan
Ella, con cara de que acaba de ver la operación de hemorroides Sergio Andrade (el primo de un amigo): Te guusssta?
Mar piensa: No, pendeja, el disco es de mi apá pero no sé sacarlo del discman para poner otro, además me corren de la escuela de Corte y Confección si los dejo de escuchar
Mar dice: Sí, obvio, no?
Ella: Ay, pero ni le entiendes!
Mar piensa: Sí, debo reconocer que la voz gutural de Dani Filth es casi inintelegible pero lo que me gusta es la música en sí, incluyendo los berridos del vocalista que ayudan a crear la atmósfera, sin embargo, si leo el librito donde vienen las letras, estoy seguro que encontraré referencias a Baudelaire, Verlaine y Lucifer (serían la misma persona?).
Mar dice: jijiji, tú que estás escuchando?
Ah, la muchacha traía también unos audífonos
Ella extiende los audífonos hacia Mar
Mar se los pone y escucha

[poner la rolita de los besitos de tarkan como le hacen Tania y Jorge]

Mar piensa: eh? Qué pedo? Esta madre está en turco? WTF?!!
Mar la ve y piensa: Pero si está tan bonita, y tine un piercing en la nariz, y un tatuaje en la espalda baja que es un caracol, y unos convers!
Mar ya no piensa
Mar: Ah, órale... este.. bueno, ya me tengo que ir
Ella: ???
Mar: hasta luego
Y la decepción lo acompaña mientras camina sin rumbo escuchando su musiquita, de ésa que cantan como perros.

Clásica, Inglés y socialité

Caminábamos una vez un amigo (el entrañable Sr. Míster Calabacín) y yo por la universidad a la que asistíamos (el tec).
De pronto él saluda a una muchacha y cuando ella se va el Sr. Míster me dice: deberías de meterte al inglés conmigo para que conozcas morras, ni amigas tienes; bueno, le dije yo.
Al siguiente día mi amá ve que me ando emperifollando (se suplica que no lo asocien con follar, les aseguro que muy poco tiene qué ver) y mi madre santa enmascarada de plata me dice: y éso, tú? porqué te andas alicusando? Ah, amá -le digo- es que me metí a un curso de inglés para conocer muchachas; áyasele, loco! mucha suerte, y, mijo, por favor, compórtate; sí amá, gracias.
Ya en la salida mi amá me regresa y me echa perfumito.
Pasan algunas horas y empieza la clase de inglés. Como ya era la 4ta o 5ta clase se me pide que me presente. Una vez cumplido el protocolo empieza una conversación en inglés en torno al tópico, elegido por la maestra, de "técnicas empleadas para conciliar el sueño y derrotar al malvado insomnio que hace que salgan las indeseables ojeras".
Cuando una morra argumentaba que poner una hoja de lechuga debajo de la cama garantizaba plácidas horas de sueño yo estaba ya considerando seriamente salirme del salón y dejarlos con sus historias de jardín de niños, pero entonces recordé a mi sabia madre y me contuve, incluso, de objetar.
Entonces alguien dijo: yo con lo que segurito me duermo es escuchando música clásica. Yo me río, bajito, y busco con mis ojos a algunos cómplices de risa... y nada. Bueno, queda la maestra... y nada, resulta que le da la razón y lo apoya agregando sí, ésa es muy buena técnica.
Algunos dos comentarios más hacen que me empieza a brincar la venita de la frenta sobre la ceja derecha y entonces digo: Yo creo que la música clásica es emocionante; y algunos, ay nooo, es bien aburrida; entonces me levanto y digo -ya en español y notablemente alterado- nooooo, cómo pueden dormirse con pam pararabara bara bam parabara barar bam justo en el 3er compás pensé: Mar, ya la cagaste, y sin dejar de cantar y marcar el tiempo con la mano derecha tomo mi mochila, me la cuelgo y me salgo del salón... cantando.

Ya en la casa mi madre, emocionada, pregunta: cómo te fue? Bien, amá, bien, qué hiciste de comer?

Si mi hacer te provoca duelo...

La Tania, normalmente comunicativa, se reserva sus asuntos cuando sabe que el conocimiento de ellos puede generar en los otros conductas que no está dispuesta a tolerar en el momento. (Ya les llegará el momento de enterarse, se dice.)
Así fue, con su último rompimiento suscitado hace algunos meses: un día paseaba feliz por la casa con su entonces novio y semanas después la familia comenzó a preguntar por la ausencia del tipo en cuestión. Las respuestas de la señorita, vagas:

En la Reunión Familiar

Tía d T: ¿Y Xxxxx?¿Todavía toca con su banda?
Tania: Ahm, pues sí. [sonrisa social]
Tía d T: Ah, que padre...
Tania: Ejeje, sí... ¿me pasas una taza?
Tía d T: Tocan bien bonitoY qué onda ¿Hoy dónde tocó?
Tania: Pues, no sé...
Tía d T: Ay niña, ¡cómo que no sabes!
Tania: Pues ya no es mi novio. [daaah]
Tía d T: ¡No me digas! Pero tan bonita pareja que hacen (en presente?), tan buen muchacho. Ay, tú tranquila, verás como luego se arreglan.
Tania: Ejejejé, ¿Eso crees? [mueca inexplicable]
Tía d T: Sí, es más, invítalo a la mariscada la semana que viene.
Tania: Voy por otra rebanada ¿de qué te traigo?


Podría citar más ejemplos, pero me da bastante flojera, así que paso a lo siguiente. Estas conversaciones son completamente explicables cuando tiene poco que has roto, normalmente al cabo de un mes la familia entera se sabe el chisme. Pero en este caso no fue así y para evitar más conversaciones de este tipo me dediqué a avisarles a todos los que me encontraba que ya no tenía al novio, prácticamente sólo recibí quejas y mentadas de madre o comentarios que me recordaban por qué prefiero no comunicar mis asuntos. Incluso alguien de la familia soltó un par de lágrimas al escuchar la noticia y uno de mis compadres palideció. Los amigos sacaban el lado amoroso para con el novio y una tipa hasta me insinuó que debía perseguirlo porque si no se me iba a ir el tren. No faltaron los: ya verás que pronto regresan y cosas por el estilo. Después de un tiempo todo empeoró, un día descubrí a un personaje de la familia hablando con otro de que lo extrañaban y de que yo debía pensar mejor las cosas (!!!!). ¡Vale soberana madre!

¡No me chinguen!, pensaba.
Qué poco entender.

Y es que, el shock era: además de lidiar con mi propio proceso de duelo, era vista como brujilda por arrancar de sus vidas a "tan importante elemento", sin pedir permiso ni perdón. ¡Por Dios!.

Para la próxima me haré tarjetitas como las de "Eternal Sunshine of the Spotless Mind":

"Le suplicamos no mencionar cuanto quiso, quiere y seguirá usted queriendo a Abcdef frente a nuestra estimadaTanuxita, ya que ese episodio está siendo borrando de su vida. Hágase pelotas con sus propios, sentimientos, opiniones, pedos y extrañares, si tanto lo/la quiere (conmigo ya no se sabe), llámele usted."

Contestación

Gritos, sombrerazos, sangre y pelos..

No siempre. Frase recurrente en el día de hoy: "A Criterio"
Puta! A criterio de quién?


No hay que ser. A fin de cuentas, ya estamos viejos pa' payasos, no? Creo.
Pa' mandrileadas, en su momento.

La frase de mi carnala "Cuánto folclor!" no está dioquis. Que sirva, por lo menos pa' nosotros.

Pa' eso están las reglas.And I will do what I must

las miadas y la oCsesión de actuar fuera de tiempo

El asunto de las miadas, ya es asunto caduco, aunque siga chingando. Una lavada con cloro ya borró la manchita amarilla del suelo y un poquito de vanish con oTsígeno borra los residuos de los tejidos burbuja a burbuja. La última micción estuvo furiosa y manchadora, pero nada que unos días de reflexión no quiten, o que unas horas de irrealidad no anulen.

Ya quisiera yo que me hubiesen invadido el blog con mensajitos asfixiantes o la cajita C con obscenidades... Ojalá me saturasen el jaifaiv con notas tirachón, o hasta el celular con insistencias y necedades, pero no: vinieron a miarme hasta mi propia casa.

Que le digan a los demás: Perros, esta hembra es mía; por todos los medios electrónicos y físicos posibles me viene valiendo madre. Pueden marcarme ante el mundo como propiedad privada y yo siempre encontraré la manera de zafarme del sello. Por mucho que me gritaran en la calle, me anunciaran o me marcaran, yo nomás no me dejo "tener" si no me viene en gana. Soy dócil, muy dócil, la pura dulzura y tranquilidad cuando estoy a la buena. Cuando no lo estoy, pues no...

¿Por qué chingados cuesta tanto al orgullo de un hombre entender una negativa?¿Por qué carajos se piensan que uno es una máquina de ternura, perdón y calidez? Está chido: una se enamora y se vuelve un postrecito feliz, pero no hay que perder la perspectiva, cuando algo vale madre, ya valió madre, por muy sonrientemente que te lo digan. Que una ruptura no me haya arrancado el semblante maniacodeprezen ni la vocecita ternurienta, no indica que mis palabras no fueran definitivas. Es aquí donde entra la mandrilesca voluntad de no entender: entre más civilizadas son las despedidas, menos comprensibles son. Entre más tiempo pasas pensando en las palabras precisas,para terminar claro y bien, más borrosa se dibuja la realidad en la mente de tu mandrilito. Lo dije varias veces, fue "entendido y aceptado"... pero a los pocos días se estaba miando en la puerta de mi casa, orinaba también a mi familia y remató orinándose en el respeto que me quedaba para él. Y repitiéndome: eres mía, eres mía, eres mía. Claro... tuya.

¿Por que las personas no comprendemos un NO tranquilo? ¿Por qué esperarse hasta que llega con el periodicazo en el hocico? ¿Por qué putas no puedes ser amable y decir adiós sin que lo tomen como un indicio de que en realidad lo que quieres es continuar?

Ya me pirateé... pero las preguntas quedan abiertas, muy abiertas.

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I looked at you, you looked at me

Una vez sucedió que trabajaba en una pizzería, y salía en la noche. A esa hora, tenía que correr para alcanzar el último tren, en la estación de Juárez, donde el tren se detiene varios minutos a esperar a todos los posibles pasajeros rezagados.

Ese día salí suficientemente temprano, como para tener que esperar la llegada del tren, y esperar un poco más mientras éste esperaba (cuántas esperas, chingao!) el tiempo reglamentario, alrededor de 10 minutos. Tuve suerte de encontrar un asiento vacío, pegado a una ventana, y fui lo suficiente gandalla como para nisiquiera pensar en si había alguna viejecilla desvalida y cedérselo. Al poco tiempo de hacerme wey en lo que partíamos, llegó el tren que iba al lado contrario, y obviamente se detuvo a un lado del que yo abordaba. En la ventana que quedó justo frente a la mía, se asomaba la cara de una muchacha. Estaba guapa, era blanca, de pelo negro y lacio, medio darkie, pero linda. Y sobre todo, su mirada me llamó mucha la atención y cautivó. La volteaba a ver por momentos con discreción, hasta que descubrí que ella también me veía. Me asusté poquito, y fingí indiferencia, volteando hacia otro lado. Luego puse cara de macizo, y volteé para ver si ella seguía viéndome. Ahora ella volteó a otro lado cuando se cruzaron los ojos. Cambié nuevamente mi expresión, y desvié la mirada. Ahora volteo, con cara de perdido, y la fijo hasta que ella me muestra sus ojos una vez más. Seguimos con el juego, supuestamente inintencionado, de cambiar las expresiones y encontrarnos con la mirada.

Mi tren partió, y nos seguimos viendo hasta que fue imposible.
Nunca más nos volvimos a ver.

Pinche distancia.

Reestructuración

Muy bien, las hormonas ya son bisexuales.
A darle que es mole de olla.

De qué escribiremos?
De nosotros. Nuestros impulsos. Nuestras alebrestadas. Nuestras hormonadas. De cuando se nos para, o nos mojamos (asegún). Nuestros enojos, desencantos, de cuando valemos verga.
De cuando cursileamos, de cuando corremos por la pradera, con quien sea, como sea.
De cuando jugamos a querer, de cuando nos aburrimos, de cuando nos la creemos, de cuando reímos y lloramos.

De cuando vivimos.

El compromiso, por lo menos para mí, es compartir, aunque sea con los otros dos escritores/lectores, mis cosquilleos, los que se dejen sacar.

Parte de la terapia es contarlo, pero la mejor parte es hacerlo.
El otro compromiso/terapia, es entrarle de exhibicionistas/voyeuristas. Le entran?


Bien Venidos sean todos (ahí disculpen el chiste que le oí a una sexóloga)

Papapapaeueeeoo..!

No sé qué pasó. Sigo en shock.
Yo que era un solitario bailando, me quedé sin hablar..
De repente, de un momento a otro, de estar aburrido, me encontré con muchas cosas nuevas.
Descubrí un sentido más profundo de los pares.
Y sonreí. Sonrío.
Alguien vino, pintó mi vida de azul y verde, me dejó una caja de sonrisas de aquí a unos cuantos años, me recordó que hay que apostar. Y se fue, pero no del todo.

Gracias por venir.


Soy un cursi, y ahorita no puedo pensar. En mi cabeza se fue la luz.

I AM MINE

¿De dónde viene la necesidad de poseer?
Alguna vez mencioné que es muy fácil (y cobarde) decir tal o cual comentario en tal o cual bog, space, grupo, foro, etc., del tpo: Siempre estarás en mi corazón, voy a enderezarte los dientes de tanto beso, etc.
Pero es como tirar una piedra y esconder la mano.
Muchas veces, ni saben el daño que causa dicha "piedra" a terceros.
Una morra que casi ni conozco, con la que alguna vez intercambié un par de correos se siente en la libertad y el derecho de decir eres maravilloso, sigo deseándote. Y bueno, eso no tiene nada de malo, pensarán, pero porqué jijos tienen que ponerlo en cierto lugar de modo que lo lean muchos y, sobre todo, muchas?

Y no es que ande uno de alebresta corazones, o tirándole el rollo a cuanta nena se atraviese. No, no y no.

Conozco a varias doñas (supongo que la mujer que lea esto pensará lo mismo sobre varios vatos) con las que no hago más que ser yo, es decir, ser amable, atento. Así soy, y lo soy con todas las personas que conozco. A algunos hombres les caigo bien, pero a las doñas les gusto. Pero de ahí a que se sientan dueñas de mí, no, no, hay much distancia.

ADVERTENCIA: A quienes no gusten de analogías de índole urinario deben evitar el siguiente párrafo.

Me siento como si me orinaran, así como perritos marcando terreno. Un terreno que ni siquiera quieren poseer. Sé que si voy y me planto con alguna de las mencionadas diciendo: Me vengo a vivir contigo, o, vengo por ti, vámonos a la casa. Se le pelarán los ojos, empezará a tartamudear y dirá, pero es que yo... cómo te digo.. no puedo... porque porque...

Ah, pero es tan fácil decir y decir por un medio tan impersonal como es el chat.
Una nena del DF, siempre me decía cómo estás hermoso, cómo estás precioso, cómo estás Marejada, y así, cariñitos más cariñitos menos.
Bueno, nos vimos en el DF y nada de nada. Como si fuera yo el señor que revisa su equipaje. Y luego, nada. Ni apodos ni nada.

Bueno, ya, nomás quiero despotricar un poquito.

A continuación, una

CITA: Bienaventurados los que aman y ninguno de los dos posee al otro.

-... mmm... Benedetti? Borges? Rocío Sánchez Asuara?

Sistemas numéricos

"Lo maduro no quita lo binario" habría dicho Jorge en una parranda que nos dimos en mochis con el Benito en la casa de... ejem, ejem... bueno, mejor no digo porque le echan la policía al Beni y lo corren del servicio. La cosa es que decíamos que, a veces, cuando uno está con una nena no puede dejar de pensar en binario: cogemos, no cogemos; 1 ó 0.
Pues resulta que, esto que parece terrible porque anula la posibilidad de una amistad, deja de serlo menos cuando analizo a las nenas.Sí, pérfidas!!! No se hagan.No intento revelarles la verdad sobre la vida el universo y todo lo demás, sino sólo expongo mi corta experiencia en esto del mundo de las chicas.Pensando un poco en algo que me dijo una mujer (de esto se trata el blog, no?) analizo algo y descubro que las binarias son las mujeres, pero más bien son terciarias (así se dice?).Pues parece ser que sólo conocen 3 estados. A saber:
0.- No me hablan
1.- Nomás la pasamos bien (cogemos)
2.- Quieren pasar toda la vida conmigo (enamoradas)
Y es bien raro, es la parte que no entiendo. He conocido muchachas que no al principio no ponen nada de sentimientos, sólo la pasan bien conmigo y ya. Pero yo no puedo estar así y ya. Si no involucro sentimientos ni se me para. De modo que tiendo a sentir un gran cariño y afecto.Entonces ellas empiezan a involucrar sentimientos también y pasan de 1 a 2.Aaah, a la chingada!!! No sé cómo explicarlo, tal vez no estoy inspirado, o no me deja concentrarme esa película con Maria Rojo y Carmen Salinas, o tal vez sean las 4 tazas de café que aceleran mi jámster.
La cosa es que no existe, para ellas, un cariño honesto y sin pretensiones.
Son como jesús, o todo o nada. O frío o caliente.
La prueba es que yo puedo platicar con mis ex-novias con mucho cariño y respeto. Me preocupo constantemente por ellas, me acuerdo de ellas, y etcétera.
Pero aaah, pinches doñas, ellas ya no me hablan, no quieren saber de mí, les molesta mi prescencia, mi existencia o nomás dicen que les doy igual, que les soy indiferente, pero nomás no me hablan.Y no lo entiendo. Incluso se portan groseras, agresivas. No me malinterpreten, no soy un ser frío y enteramente racional. Claro que me duele que la relación (de cualquier tipo) haya emigrado a otras estratósferas, que se transforme lo que empezamos alguna vez.
Pero... ay ya! Me da tedio... no, en verdad me da miedo ir a ese lugar. Siento que nomás la estoy desparramando. No sé cómo explicar la idea, no puedo dejar de pensar en el jucio que emitirían tal o cual persona si leyera este texto.
Pero bueno, debo concluir aunque haya explicado nada.Supongo que es la edad.
Ahora citaré (más o menos) a Onneti:"Las mujeres son más inteligente y más maduras que los hombres, desde niñas. Pero tan pronto llegan a los 25 años transforman toda su inteligencia y madurez en un obsesivo deseo por tener un hijo, todo en ellas gira en torno a su futuro hijo"No estoy del todo de acuerdo con ese machista, lo cito para tratar de entender algo.
Bah!
No sé, no me siento bien.
Cheer me up.
1 punto 5. O un número que esté entre el 0.5 y el 1.5 que no es el 1.Aaaaah! La matrix!!!

Invocación maldita

Ma mojo in crescendo

Fumo mucho.
Pisteo mucho.
Soy egoísta.
Tengo los dientes manchados.
Me gustan las películas de balazos y sangre.
Prefiero jugar en la compu antes que socializar.
Las cosas se tienen que hacer como yo quiero, si no, me enojo.
Soy mamón.
Me estreso si no se oye la música que yo quiero.
Ebrio, a veces me pongo malacopa y agresivo.
Tengo el pecho hundido, no creo que se vea muy sexy.
He puesto el cuerno, creo que a veces no soy de fiar.
Ya escribí que fumo mucho. Y es en serio. Aunque moleste a los demás.
Soy malhablado.
Eructo.
En realidad no soy muy bueno haciendo el amor.
No soy muy ordenado.
A veces, si alguien está triste, prefiero ignorarlo.
Y hay más, mucho más.

Por qué me llegan a querer las mujeres?
Supongo que en eso radica la funcionalidad.

Las trusas de la “suerte”

Creo que todos tenemos alguna prenda o accesorio en particular que nos hace sentir particularmente atractivos pero también creo que el hecho de gustarle o no a alguien en particular tiene que ver con la prenda o accesorio en cuestión como se verá a continuación.
Una vez, creo que en el 2do semestre de la carrera (no hagan cuentas), me gustaba una muchacha en particular, claro que ella no se fijaba en mí. Alguna vez coincidimos en una fiesta en un ejido en una casa a la orilla de la carretera. Yo estaba más aburrido que la roña (la roña también se aburre) pero platicando mensadas me entretenía. Aunque estaba un poco nefasteado porque no me animaba a hablarle a la muchacha y no sabía cómo acercarme a ella. Cuando todos se pararon a bailar me di cuenta que la fiesta había terminado para mí y me fui a buscar algo mejor que hacer. Intentar platicar con la muchacha había sido un desastre. Así que la descarté.
Mi creatividad es inversamente proporcional a la cantidad de luz natural, o sea que, cuando el sol se empieza a ocultar es cuando empieza a despertar mi parte creativa (sí, por ahí tengo alguna parte creativa muy bien escondida). Para estas alturas de la fiesta ya se había hecho de noche y yo, como se vio, estaba aburrido y ocioso (gracias a dios aún no pisteaba por esas fechas) así que caminé hacia la carretera y me acosté en medio, sobre la rayita que divide el carril izquierdo del derecho.
Fue una experiencia muy emocionante que no platicaré en este momento. Si tu curiosidad es tan grande que no puedes esperar a que me dé la gana de contarlo entonces busca una carretera y asombrarás de la cantidad de adrenalina que puede segregar tu organismo.
En fin, regresé a la fiesta y la muchacha en cuestión estaba de pie y sonriendo me preguntó: Qué hacías? Y yo, apenado: nada.
Pues bien, eventualmente nos hicimos novios, pronto publicaré al respecto, hay muchas enseñanzas invaluables en dicho proceso. Lo que quiero rescatar es que le gusté justo cuando no preocupé por gustarle.

Aquí es cuando vuelvo a lo de la prenda o accesorio en particular. Aún sabiendo que muchas veces es algo fútil aún así tengo mis trusas de la suerte.
Cuando voy a salir con una muchacha que me gusta o se me antoja, me preocupo por ponerme unos choninos (recién he aprendido la palabra bombacha). Creo que la mayoría lo hacemos. Es natural, cierto? Ya si eres más meticulosa(o) recortas algunos vellos en algunas partes estratégicas. A veces es tanto mi alucín que, aunque sea la 2da vez que vea a la mujer ya tomo semejantes medidas y, en casos extremos, nomás por saber que iré a una fiesta ya me pongo los atigrados con cierrecito. Sí, aunque no conozca a nadie de los que estarán en la fiesta mas que el que me invitó. Llamémosle precaución. También lo hago cuando voy a jugar basket, digo, por si acaso llego a tener un accidente y me tienen que llevar al hospital y quitarme la ropa para revisarme.
Pero cuando voy a estar en mi casa todo el día, o cuando voy a la casas de mis compas a jugar nintendo wii, o a una parranda de puros hombres (no tan puros... ni tan hombres, jiji) pues me llevo los más folklóricos, relajados, estrafalarios, cómicos y... sí, hay que decirlo, con algún que otro discreto pero acertivo hoyito.

Sin embargo (aquí viene lo bueno y la razón de ser de esta entrada), la técnica funciona a la inversa. Me explico:
Cuando me pongo calzones bonitos estoy anticipándome para un encuentro íntimo de modo que al platicar con la posible pareja (estrictamente mujer) sólo estoy pensando en la estrategia que me lleve a lucir mis chones, lo cual, como es sabido y experimentado por muchos, hace que las nenas se replieguen en su caparazón (en su concha, jajajajaja), como caracol, pues me muestro agresivo, tenso, serio, intencionado, y todo eso que hace que me aleje de mí mismo.
Cuando me pongo calzones feos estoy muy relajado porque no me interesa un encuentro íntimo, de modo que me comporto alegre, alivianado, desinteresado (en su sexo), y las trato como lo que son: Personas (sí, sé que es una pendejada y varias me han de querer partir la madre). Y si, dado el caso, ellas muestran interés sexual en mí, rápidamente recuerdo qué calzones traigo y entonces me vuelvo a relajar, pensando, no Marco, qué placa que te vea con éstos.

En resumen: Con calzones bonitos para ligar nunca ligo, con calzones feos para no ligar, ligo.

Sólo que, ahora que lo he descubierto he tratado de sacarle ventaja de modo que pienso: mmm... esta nena me gusta, me pondré chones feos para portarme relajado y así poder besarle la orejita y morderle los cachetes.
Y, pues, evidente y obviamente me pongo tenso.

¿Qué hago?

Con fuerza y precisión

Hace algún tiempo (varios años) conocí a una nena y pues nos gustamos. Algunos años mas tarde (como sale en las películas) nos reencontramos y nos gustamos más.
Después de algunos días de llevar el jueguito del cortejo nos dimos cuenta de que nos traímos ganas (bendita reciprocidad).
Nos pusimos de acuerdo para vernos, al parecer sin algún plan de qué íbamos a hacer.
Pasé por ella en el carro y dimos vueltas y vueltas sin saber a dónde ir, aunque se percibía lo que queríamos hacer.
Ella, no sé si porque estaba nerviosa, se la pasaba hable y hable.
Yo, porque estaba tenso por la presión sexual que sentía, estaba serio serio.
Mientras tanto, dentro de mí, trataba de conciliar lo que dictaba mi cabeza chica (Cc) a mi cabeza grande (Cg):

Cc: quiero coger
Cg: Lo sé, al parecer ella también quiere ¿Cómo le hacemos?
Cc: Mmm... quiero coger.
Cg: Ya sé, chingado, estoy buscando los mecanismo ¿Alguna idea, sugerencia, táctica o estrategia?
Cc: quiero coger
Cg: Óquela contigo
Cc: pues quiero coger!
Cg: Pues sí pero esto no es así de fácil, no somos animales, hay que lograr una comunión espiritual, ser firme pero sin parecer agresivo, ni rudo, ni, mucho menos, de-ses-pe-ra-do. Hay que ser sutil, no forzar las cosas, buscar la ocasión ideal. Que las cosas se den pero ser decicido a la vez.

Narrador: Y así, mientras ella seguía hable y hable, marquitos, por fin, se decidió a hablar pues algo había sucedido dentro de su ser. Y las palabras que emanaron de su boca fueron:

¿Ton's qué, al popeye, al pueblito o al ranchero?
Nota: los 3 son nombres de moteles "de paso"

Cg: ¡Ya valimos madrte! ¡Pinche Cc, tenías que hablar!
Cc: quiero coger... Mira, está fascinada y atacada de la risa
La nena: jajajaja, pinche Mar, al que quieras!

Cg y Cc: ¡A wiwis!

Cae el telón.

¿Se awitan?

Alcohol + saldo en el celular = Posible cruda moral

Magna habilidad

Yo también tengo varias historias como el primer post de Marco.

Un día, viajando en camión de Guadalajara a Mochis, al llegar a Culiacán, me bajo a fumarme un cigarro (obvio, poniendo mi cara de perdonavidas, pero con poquitas lagañas).
Estando en eso, se baja una chava también, prende un cigarro, y se para junto a mí.
No recuerdo casi nada de esa chava. Rectifico: Nada. Nomás creo que traía blusa amarilla.

Chava de BlusaAmarilla - Uh.. de viaje, eh? (Rascándose la nuca y con mirada perdida)
Masio - Si. (Da una larga fumada a su cigarro, la ve de reojo, y vuelve a mirar a lontananza)
Chava de BlusaAmarilla - Ah!... y... a dónde vas?
Masio - (Voltea a verla nuevamente con mirada de perdonavidas-déjamefumarmemicigarroestoymodorro) Uh.. a Mochis. (larga pausa, dos fumadas más) Y tú?
Chava de BlusaAmarilla - Yo voy a Guamúchil (Sonríe)
Masio - Y a mí qué carajos? Ah, bien! Bah..
Chava de BlusaAmarilla - Y.. (rascóse la nuca nuevamente, y perdió un poco la mirada) De vacaciones? Estudias en Guadalajara?
Masio - Si.. sí, allá estudio. Supongo que tu también. Ay dios, una nueva plática de hueva.. me pregunto..
Chava de BlusaAmarilla - Ahh.. Y queeé estudias? (Notoriamente, alargó un poco el 'qué', lo cual provocó un ligero tic en el ojo de Masio)
Masio - Psicología.
Chava de BlusaAmarilla - Órale, está chido, no?
Masio - Pues sí. Qué pretende esta chava? Por qué me estará interrogando? Espera un momento.. Podrías ligártela! Un ligue de camión! Nunca te ha tocado alguno..
Masio - Ah.. y tu qué estudias?
Chava de BlusaAmarilla - Estudio para ser educadora! (Sonríe animosamente)
Masio - Já! Qué puto tono pretendiste darle a esa risa? Sarcasmo? Burla? Interés? Imbécil..
Chava de BlusaAmarilla - (Pareció no haber notado la risa descontextualizada de Masio, y continúa esperando a que Masio prosiga con la plática) ... Pues si.. ... ey.
Masio - ...

Masio le da sus últimas dos fumadas al cigarro, después de haber fumado en silencio.
Masio - Ya me voy a subir pues.
Chava de BlusaAmarilla - ...


El resto del camino ella fue dos asientos más adelante que yo, y no me volvió a dirigir la mirada cuando se bajó. Iba sola, y con una cobija muy grande. Yo tenía frío.

¿Qué buscamos en una mujer? (O sobre sodomizaciones divinas y sus motivos)

Hace tiempo, cuestión de semanas, platicando Marco y yo, él me comentaba sobre su amigo Sergio, si mal no recuerdo, con respecto a una frase que va en chinga a conseguir su publicación en la sección de Citas Citables del Selecciones del Reader's Digest, o ya de perdis en alguna nota rojaamarillaverdeazulada del Alarma, Semanario del Insólito, o algo así, como título. "Dios me va a meter la verga". Verga, duele?
El motivo de esta edípica y divínica y metafísica afirmación era que Sergio era (o es? no tengo el honor de conocerlo, más que por referencias Marquianas) algo pasado de lanza con las muchachas. Nada grave, n'amás le daba (o da?) por andar saltando de vieja en vieja (supongo que en varios sentidos de la palabra).. ser medio patán pues. Mejor no ahondo más en la historia original, no vaya a ser que la tuerza toda. Ya Marco podrá escribir un poquito más sobre eso, si le da la gana.
Todo esto me llevó a pensar: Chin! Qué es lo que buscamos en las muchachas?
Aquí viene un listado al vapor, y muy escueto (qué? acaso el arroz al vapor sabe güeno?)
1- Somos hombres, queremos chichis. Osea, todo lo que un cuerpo femenino implica. Con o sin pelos, la idea es la misma, y es algo que buscamos. Ya está muy trillada la crítica esa de que "Naah, en lo primero que me fijo en una mujer son sus ojos, o sus sentimientos, o sus.." Sus chichis, qué. Por eso lo escribo de una vez, pa' desafanarme. Hombres quieren sexo, buscan mujeres (bué', hay quienes buscan hombres, pero no es algo que me quite el sueño).
2- Alguien que por lo menos sepa hacer arroz y café aceptablemente (mamá..! snif.), es bien sabido que un organismo normal puede sobrevivir con una dieta de arroz y café. No por eso digo que los hombres estemos excentos de eso y con saber hacer marúchanes ya la hicimos. Pero buscamos viejas que nos satisfagan con por lo menos dos de los cuatro placeres de la vida (cojer, comer, dormir y cagar.. esta última está medio cabrona). Y sobre todo si buscamos a alguien que cumpla con ciertas características de la jefa. Otra frase trillada (chale, voy a terminar haciendo de mis posts un remiendo de frases trilladas y clichés), "Al corazón se llega por el estómago", o algo así (chin! lo que aprendí de anatomía en la primaria estaba mal!).
3- "Comprensión". En qué coños radica la comprensión? En poder hacer una sarta de pendejadas y que no se awiten? En contarle todas nuestras tripas y lloriqueos y que todo el tiempo nos estén escuchando con una linda carita "comprensiva" y expresión vacía, como si hubiera estática en su cerebro? En que tengan desarrollado a tal grado sus zonas corticales y subcorticales de manera que puedan leer la mente y las necesidades de las personas, y por ende nos satisfagan en todo, o entiendan que no estamos de humor para responderles si están gordas o no?
Curiosamente, a todos los cabrones buenos pa' nada que les pregunté que si qué carajos buscaban en una vieja, me respondieron "comprensión", o algo relacionado. Viéndolo desde un lado positivo, es justo y necesario que una vieja nos comprenda.. o entienda.. o nisiquiera eso, pero que por lo menos exista empatía para poder sobrellevar una relación "sana" (mejor hay que chingarnos un chocomil con la vieja todos los días, así la relación crecerá fuerte y sana). Hace un rato, levantando mi seriesícima encuesta con respecto a esto, un compa, Antonio, me dijo algo que me llamó la atención:
"supuestos basicos que no tomo en cuenta... osea.. si no hay esto ni siquiera la pelo: bonita, chida, buena onda y eso que dices vieja = sexo".
Posteriomente ahondaré en ese tema, por lo pronto le sigo con lo que estaba. Precisamente, pa' qué carajos decir que buscamos "comprensión" en una vieja, si es algo que se necesita de planta para una relación!

4- -Inteligente-. Puff! Ahora desarrollarán pruebas psicométricas para medir el nivel de inteligencia necesario para establecer una relación con cierta persona? Y con eso de que existen muchos tipos de inteligencia, esas pruebas evaluarán varias áreas, y el resultado lo van a poner en una bonita grafiquita de colores (a elegir: de pastel, de barras, de radar..)? Alguien que maneje todos los tópicos posibles y estándares de conversación, por si vamos a la fiesta, por si vienen mis papás, por si vamos a una conferencia, por si vamos al fútbol, por si vamos a una recepción diplomática en la Embajada de Ruanda, que si conocemos en la parada del camión a un astronauta y a un premio nobel en química? Que si tengo pedos con mi tarea de matemáticas, que si no quiero hacer un ensayo? Chin. Y aparte, que se quede callada cuando se nos salga lo machos.

5- Que sea asertiva. Explícoles el término, pa' la banda inculta que no sabe: Dícese de la persona que tiene respuestas y reacciones adecuadas y chidas ante cualquier situación. No importa que se enoje y todo, pero sabiéndolo manejar. Ahhh, chido, entonces puedo llegar bien pedo y empezar discusiones con la muchacha, y le vamos a delegar toda la responsabilidad de salvar la relación cuando haya problemas, porque como es asertiva, inteligente y cariñosa, psh, ya chingamos.

Bien, como era el vapor, pues ahí le dejo. Entooooonces.. Retomando lo que me dijo mi compa Antonio, encuentro mucha razón en su postura. Por ejemplo, lo primero que me dijo cuando le pregunté:
DropEgg,: Huevo. dice:
es una falacia eso del sexo
DropEgg,: Huevo. dice:
porque independientemente de la mujer siento como que obligado ese pedo .. asi que
DropEgg,: Huevo. dice:
no es eso...
Y con esto reafirmo mi primer punto. Si buscamos una relación, es en parte porque andamos calientes, y sabemos que lo vamos a satisfacer de esa manera. Y hay cuestiones básicas, como bien lo dijo él, que ya ni se deberían considerar para una relación. Si nos llevamos con alguna chava, y le andamos echando el ojito, es porque existe cierto vínculo de "amistad" (jaja, sii, claaro.. pero ese es otro pedo que Marco ya escribió anteriormente), y esa "amistad" implica que son lo suficientemente semejantes y lo suficientemente diferentes como para llevarse bien. Como bien me dijo mi jefe una vez "En una relación, cuando los dos son completamente semejantes, sobra uno. Cuando son completamente diferentes, sobran los dos".

Continúo entonces. Pedimos y buscamos muchas cosas, pero.. qué ofrecemos? Acaso estamos bien buenotes, y somos tigres en la cama (brrr.. maldita imaginación)? Sabemos cocinar algo más que marúchanes, y cuando estamos creativos, quesadillas (sincronizadas, kioobo)? Somos comprensivos, cariñosos, y detallistas? Hacemos mentalmente divisiones largas, nos sabemos de memoria la tabla periódica (con todo y los jevimetaleros), somos sagaces y sabios en cuestiones filosóficas, y demás? Preferimos cambiar la palabra "problema" a "reto", y mantenemos siempre una sonrisa en el rostro?
La idea no es echar mierda, ni aseverar que somos unos egoístas. En parte creo que a veces se nos olvida pensar en eso también. O por lo menos a mí si (otro episodio de catarsis más por cortesía de El Masio).

Y todo este trip venía porque.. Chale, últimamente he sido muy exigente con las relaciones. Y estoy igual que Sergio, saltando de vieja en vieja. Sólo espero que la sodomización divina que me espera, me beneficie con un poquito de experiencia en 'viejing'. O 'sexing'? Sabe..
Yo sólo quiero.. nah, no les voy a decir.
Ah!, ya me acordé que seguía. Lo triste de todo esto, es que con eso sólo se denota la constante búsqueda de poder, y un vacío medio jodido. Aunque sea muy cliché, no puedo evitar pensar en un vampiro. Seducir a una mujer, pasar unos buenos ratos con ella, y órale, reta. Vacío porque las relaciones largas no satisfacen ya, se busca siempre algo nuevo, aunque esté pior que lo anterior, siempre tener esa sensación de la tripita torcida mientras se piensa "me va a pelar o no? la beso o no? le digo 'tons qué mami?' o no?"
Bah, chale, ya me awité.. Mucha crítica? Nah, yo también tengo mi corazoncito..